Clásicos • 19 Jan 2023

Renault Estafette: Polivalencia sobre cuatro ruedas

Lanzado en 1959, el Estafette marcó un hito para Renault en el sector de los vehículos industriales y permaneció al servicio de numerosas empresas y concesionarios durante casi veinte años, hasta 1980. Y era un vehículo extraordinariamente innovador.

Fue en 1953 cuando la Régie Nationale des Usines Renault lanzó el proyecto, en un momento en el que también trabajaba en el Dauphine (el modelo que sucedió al Renault 4CV y que se produjo de 1956 a 1967). En ese sentido, aunque esta pequeña berlina con motor trasero había sido la base tecnológica del Estafette, con el que compartía numerosos elementos técnicos, esta furgoneta operó un cambio técnico radical. Hasta entonces, Renault nunca había ofrecido un vehículo con motor delantero, ni siquiera para sus turismos.

El ingeniero encargado del proyecto, Guy Grosset-Grange, decidió situar el motor en la parte delantera porque, desde su punto de vista, era la opción más racional para liberar la parte trasera del vehículo de todos los elementos mecánicos, algo que permitiría rebajar la altura del piso de carga, facilitando el esfuerzo de cargar objetos, lo que correspondía a una aspiración del cliente. Además, para facilitar la carga y descarga, la puerta lateral era corredera.

Además de ser el primer Renault con motor delantero, el Estafette, concebido para competir con el Citroën Tipo H (1948) y el Peugeot D3A (1950), también tiene los órganos de transmisión situados en la parte delantera.

El bloque inicial era del Dauphine, con 845cc y 32cv (motor Ventoux, y que tendría en el Estafette la mayor cilindrada en que se fabricaría). En mayo de 1962, el modelo fue también el primero en recibir el nuevo motor Renault “Sierra” (más tarde llamado Cléon-Fonte, por el lugar donde se fabricaba, y que fue desarrollado por René Vuaillat), con cuatro cilindros y 1108cc (45cv a 4.500 rpm), y que aparecería en un turismo en junio de 1962, en el Renault 8. En septiembre de 1968, el modelo se presentó con un 1.289cc, con algo menos de potencia, 43 CV. Incluso se pensó en una versión diésel, pero nunca salió adelante.

La Estafette sedujo a todo tipo de público, desde los vendedores de helados hasta los campistas, ya que su atractiva polivalencia de uso procedía de las versiones en las que se proponía, incluida una variante de hasta 500 Kg (“Zone Bleue”, tipo R2131 debido a una especificidad francesa derivada de una ley de estacionamiento que prohibía la presencia de vehículos comerciales con una carga útil superior a 500 kg en la ciudad), otro de 600 kg (tipo R2130), una versión elevada (con una altura de 2,21 metros en lugar de 1,93 metros), un pick-up cubierto y el Microcar de nueve plazas (un microbús, en configuración 2+4+2+1). En 1961, llegó la versión acristalada Alouette que se haría popular, ya que era una derivación del minibús con asientos desmontables que se transformaba fácilmente en un vehículo de camping.

Originalmente, el Estafette sólo salía de fábrica en cuatro colores de carrocería: gris, azul, amarillo y naranja.

Dejó de fabricarse en 1980, tras haber producido 533.209 ejemplares, y fue sucedido por el Renault Trafic.

Este y otros modelos icónicos de Renault estuvieron disponibles en la exposición temporal “Renault: 120 años en la carretera”, que se exhibió en el Museu do Caramulo del 2 de diciembre de 2018 al 19 de mayo de 2019

Vea a continuación la galería con algunas de las mejores imágenes del Renault Estafette.