Los secretos ocultos del Museo Mazda de Hiroshima

No es ningún secreto que Mazda tiene una rica tradición de cultura japonesa. Fundada en 1920 -hace 103 años, el pasado 30 de enero- como Toyo Cork Kogyo Co (renombrada Toyo Kogyo en 1927 y adoptando el nombre de Mazda en 1984), la empresa automovilística con sede en Hiroshima ha vivido años consecutivos de innovación y éxito en todo el mundo, habiendo diseñado innumerables vehículos icónicos. Sin embargo, lo que muchos desconocen es la profundidad de las raíces de Mazda.

Ubicado en la sede central de Mazda en Hiroshima y accesible al público, el Museo Mazda es el lugar ideal para revivir este rico y dinámico pasado. A través de diez áreas temáticas, el espacio sintetiza más de 100 años de historia única, desde tecnologías apasionantes e innovadoras hasta conceptos galardonados e ingeniería de última generación. En todas ellas, el Museo encarna a la perfección el espíritu de desafío constante de Mazda, con innumerables ejemplos de creatividad por descubrir.

Zona 1: el pequeño triciclo que ayudó a reconstruir Hiroshima

Fue en Osaka (Japón) donde Jujiro Matsuda inició la andadura de Mazda. Uno de los primeros vehículos de la marca fue también una de sus creaciones más notables: un minicamión de tres ruedas.

El Type-TCS da la bienvenida a los visitantes del Museo Mazda, perfectamente impregnado de la ecléctica historia de la marca. Construido íntegramente con piezas de fabricación propia, era un 40% más potente que su predecesor Type-DA, con una impresionante capacidad de carga de 400 kg. En 1938 Mazda lanzaría el Type-GA, reanudando su producción apenas cuatro meses después del final de la Segunda Guerra Mundial. En 1946 encabezaría el mercado con un volumen de producción de 2.430 unidades. Apodado “Panel Verde” por su salpicadero verde, símbolo de paz y seguridad, el Type-GA se mantuvo en producción hasta 1949. En la actualidad, el Museo Mazda exhibe su modelo sucesor (Tipo-GB) en este emblemático color.


Zonas 2-3: el nacimiento del Soul Red Crystal

A mediados del siglo XX, Mazda centró su atención en los vehículos de gran volumen. Desde turismos hasta berlinas de lujo, la marca empezó a darse a conocer en todo el mundo con una variada gama de ofertas.

Algunos de los vehículos más históricos y emblemáticos de Mazda son el Cosmo Sport, el Savanna y el Cosmo AP. Este último destaca por ser uno de los primeros vehículos en salir al mercado en color rojo, una rareza en su segmento de mercado a mediados del siglo XX, ya que los modelos de gama alta solían limitarse a colores base mucho más sobrios: negro, blanco o plateado. Con este enfoque tan poco convencional nació la singular relación de Mazda con el color, que aún hoy es sinónimo de la marca. El Cosmo Sport es también una rareza, ya que de los cerca de 1.200 ejemplares producidos, sólo quedan 480 en circulación.


Zona 4: el Sport-Prototipo del Grupo C, ganador en Le Mans

Mazda ha demostrado todo su espíritu de desafío en diversas modalidades del automovilismo mundial, como las 24 Horas de Le Mans y el Campeonato IMSA. ¡Encendamos los motores!

Una de las instalaciones más espectaculares es el Mazda 787B que voló hacia la victoria en las demoledoras 24 Horas de Le Mans de 1991. El Museo lo presenta en el escenario de un foso del circuito, donde los visitantes también pueden admirar recuerdos y objetos relacionados con las pruebas de resistencia más famosas. Fue en ese año cuando Johnny Herbert, Volker Weidler y Bertrand Gachot condujeron al equipo Mazdaspeed a una victoria histórica.


Zones 5-6: el motor V12 único y exclusivo

El espíritu de desafío de Mazda sigue vivo en las Zonas 5-6, que muestran cómo los años 80 fueron una época de ofensiva en un mercado competitivo.

El primer y único motor V12 de 4.000 cc de Mazda se desarrolló entre finales de los 80 y 1992, y puede verse en la Zona 5. Fusionando dos motores V6, el equipo de desarrollo pretendía construir un bloque para el mejor coche del mundo. El motor V12 nunca llegaría al mercado, pero el espíritu de desafío de Mazda estuvo muy presente en sus desarrollos de conceptos y trenes motrices, incluido un motor rotativo de tres rotores y un motor V6 de ciclo Miller.


Zona 7: el SUV que dio a conocer al mundo el concepto “Kodo – El alma del movimiento

Entrando en una nueva era: el Mazda CX-5, el Mazda6 y el MX-5 representan un nuevo capítulo en la historia de Mazda, creando nuevas referencias en el sector, no solo con la introducción de la tecnología Skyactiv, sino también del exclusivo diseño Kodo.

Lanzado en 2012, el SUV Mazda CX-5 fue el primer modelo en incorporar el nuevo concepto de diseño de Mazda “Kodo – El alma del movimiento”. Su silueta elegante y deportiva se inspira en un guepardo a punto de abalanzarse sobre su presa. Su diseño vanguardista se complementa con la tecnología Skyactiv, que maximiza el rendimiento y la eficiencia de la conducción, dando como resultado un SUV crossover con mucho encanto.

Zona 8-9: un coche dañado y destruido a propósito

Además de la excelencia de los vehículos, el espacio también exhibe ejemplos de los más altos estándares de seguridad adoptados por Mazda en sus modelos. Una serie de impresionantes instalaciones permiten conocer el trabajo realizado por los ingenieros de la marca y presenciar en tiempo real las fases de producción de los vehículos Mazda.

Un Mazda CX-30 dañado durante unas pruebas rutinarias de seguridad es uno de los momentos más memorables del Museo Mazda. Aunque los daños en la parte delantera del vehículo son importantes, el habitáculo y el interior mantienen excelentes niveles de protección. En la Zona 9 también es posible pasear por la cadena de producción de Mazda en la planta de Ujina, donde la marca fabrica mil vehículos al día. Cada vehículo requiere unas 15 horas de trabajo de alta precisión antes de estar completamente terminado.


Zona 10: mirando hacia el próximo siglo

En toda la Zona 10, la audaz estrategia futurista de Mazda queda patente a través de sus exclusivos conceptos de diseño Kodo, que incluyen una bicicleta, un sofá y una espectacular escultura Goshintai.

En la Zona 10, los elegantes y llamativos exteriores del Mazda Vision Coupé y el RX-VISION ofrecen la nota final perfecta a los visitantes del Museo Mazda. Estos dos coches se materializaron utilizando las habilidades combinadas de un modelista de arcilla altamente cualificado, que empleó toda su pericia para convertir las ideas en modelos a escala real que más tarde se convirtieron en prototipos. Junto a estos dos conceptos se encuentra el Mazda LM55 Vision Gran Turismo, un modelo a escala real del coche disponible en el videojuego “Gran Turismo”. El vehículo combina la filosofía de diseño Kodo de Mazda con un guiño al ganador de Le Mans, el Mazda 787B.