Aston Martin DB5 celebra 60 años

Presentado en el Salón de Frankfurt en septiembre de 1963, el Aston Martin DB5 se convertiría en un automóvil verdaderamente icónico, inmortalizado por las películas de James Bond. Fue diseñado por Carrozzeria Touring Superleggera y producido hasta 1965 en un total de 1.059 unidades.

Equipado con un motor de seis cilindros en línea construido totalmente en aleación R. R. 50 de aluminio-níquel, de doble árbol de levas a la cabeza, tres carburadores SU y 4,0 litros de cilindrada, el DB5 cuenta con 282cv a las 5.500rpm y 380Nm de par a las 4.500rpm. Acoplado al motor está una caja manual de cinco velocidades producida por ZF, que envía la potencia al diferencial trasero Power Lok. El automóvil podía alcanzar la velocidad máxima de 240km/h, haciendo que la marca británica afirmara que el DB5 era el GT de cuatro lugares más veloz del mundo.

En 1964 se lanza la versión más picante, el DB5 Vantage, ahora con tres carburadores de doble cuerpo Weber y levas con perfil diferente, pasando el motor a cargar respetables 325cv a las 5.500rpm. Sin embargo, solo 65 ejemplares fueron producidos, haciendo de este modelo uno de los más buscados.

El lujo y refinamiento no fueron descorados y si la calidad de construcción seguía siendo idéntica al del anterior DB4, con el DB5 Aston Martin introdujo más equipos, como los vidrios eléctricos y la posibilidad de ser equipado con aire acondicionado.

El resto es historia, como dice el dicho. Seis décadas después, el Aston Martin DB5 permanece en un panteón de absoluta importancia en el universo automovilístico, poblando los sueños de entusiastas por todos los lugares del planeta.