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Archivos • 16 Nov 2023
Bugatti EB110 GT: La máquina infernal que cambió las reglas del juego
Cuarenta años después de la muerte de Ettore Bugatti en 1947, la legendaria marca fue adquirida por Romano Artioli, un hombre de negocios italiano, con el fin de revivirla en la forma de un supercoche sin rival.
Artioli eligió Módena para construir la moderna fábrica, la misma ciudad de Ferrari, Lamborghini y Maserati, ya que era donde se encontraba el know-how para este tipo de automóviles.
El primer EB110 de producción, así llamado para señalar los 110 años del nacimiento del fundador original, salió de las instalaciones en 1992.
Diseñado por Marcelo Gandini, aunque con modificaciones introducidas por Gianpaolo Benedini, y por Paolo Stanzani, co-creador del Lamborghini Miura y Countach, el EB110 era muy avanzado para la época. Con un chasis de fibra de carbono, construido por Aerspatiale, un motor V12 de 3,5 litros y una caja de cambios de seis velocidades, este Bugatti con estas características ya sería interesante. Pero el concepto fue llevado al extremo y fue dotado además de tracción integral, cuatro turbocompresores y cinco válvulas por cilindro.
Toda esta tecnología estaba envuelta en una carrocería de dimensiones muy compactas. La adherencia, agilidad y placer de conducción, sin tener en cuenta las condiciones atmosféricas, fueron los factores primordiales en la concepción de este modelo. El EB110 ofrecía un comportamiento superior a cualquier otro supercoche rival.
Esta versión, el GT, ofrecía 550cv de potencia y alcanzaba los 342 km/h de velocidad máxima, tardando menos de cuatro segundos en llegar a los 100 km/h, eclipsando el Ferrari F40, en la altura el automóvil italiano más rápido. Obviamente, todas las atenciones se centraron en las prestaciones y en el precio, que en aquel momento se situaba en 330000 euros, pero el EB110 era también un producto excepcionalmente bien construido y dotado de un habitáculo espacioso y muy bien equipado.
Esta versión, el GT, ofrecía 550cv de potencia y alcanzaba los 342 km/h de velocidad máxima, tardando menos de cuatro segundos en llegar a los 100 km/h, eclipsando el Ferrari F40, en la altura el automóvil italiano más rápido. Obviamente, todas las atenciones se centraron en las prestaciones y en el precio, que en aquel momento se situaba en 330000 euros, pero el EB110 era también un producto excepcionalmente bien construido y dotado de un habitáculo espacioso y muy bien equipado.
Cabe destacar también dos de los récords de velocidad obtenidos por el EB110. El 3 de julio de 1994, una versión GT equipada con un sistema de alimentación de gas metano alcanzó 344,7 km/h en el Circuito de Nardo, mejorando el valor de la versión de producción. En marzo de 1995 una versión modificada del Super Sport alcanzó los 296,34 km/h sobre el hielo en Finlandia.
Se han producido menos de 130 ejemplares de este modelo, siendo 95 de la versión GT. Entre los clientes importantes de la marca se encontraba Michael Schumacher, el conocido piloto de Fórmula 1.
Este EB110 GT, con el chasis Nº 39054 y producido en 1993, fue matriculado nuevo en Portugal y estuvo siempre en nuestro país. Ha sido especificado en el tradicional azul Bugatti, símbolo de la marca, y tiene como equipamiento opcional las llantas de siete radios que equipaban de serie la versión Super Sport del mismo modelo.
Vea la galería a continuación con algunas de las mejores imágenes del Bugatti EB110 GT.
Fotografías: Joel Araújo