El clásico que marca

Sem categoria 18 Dez 2023

El clásico que marca

Por Marcos Santos

Se reconoce que los hombres y sus juguetes tienen un vínculo casi umbilical.

La mayoría de las veces los carritos de juguete ganan a los Legos, a los puzzles y a los juegos de mesa. Esto hasta la generación 2000, porque a partir de ahí la lucha de los carros es con internet, smartphones, tablets, gaming y así sucesivamente. Sin embargo, es muy difícil separar a un niño de un cochecito, a un joven de un automóvil y a un adulto de un clásico.

¿Quién no tiene un familiar, o un amigo que ha conservado en perfectas condiciones un automóvil, acompañando su envejecimiento hasta el estado envidiable de clásico?

Pues! Todos tenemos a alguien así en nuestra vida, aunque sea un simple vecino que el domingo saca de su garaje su “clásico” para tomar el sol y con suerte va a dar una vuelta, porque lo que es raro es para estimar y solo sale a la calle en las mejores condiciones climáticas.Cuando tenemos la suerte de tener un automóvil así en la familia, tenemos el privilegio de tener un pedazo de historia y un marco de época! En mi caso, todo sucedió con un Citröen DS 20 de los años 70 que además de ser un icono, tiene una historia particular y quizás la cuente un día.

Rojo, con su techo dorado y su interior marrón, habitó mis ojos viéndolo siempre en el garaje. Recuerdo haberlo visto salir una o dos veces para llevar a algún familiar que se haya casado, o para ir a la inspección periódica obligatoria.

Mi tiempo, siempre que podía, era sentado al volante imaginando un camino largo para poder disfrutar de los “sofás” de “boca de sapo”, como tantas veces oía en las conversaciones en la mesa. ¡El olor de la piel de la tapicería, el “clic” del botón de la radio que se encendía, la antena que subía de inmediato al sonido de la estática y los faros direccionales despertaban sensaciones únicas, misteriosas y curiosas! ¿Cómo habría sido el pasado de ese Citröen?

El tiempo pasó, saqué la licencia y creo que solo conduje el icono de la familia con más de 30 años de edad, ya pintado de negro, restaurado y en camino a una certificación de automóviles clásicos, con mi abuelo al lado. Qué orgullo, qué privilegio y qué responsabilidad.

El DS pasó la certificación con grandes elogios de quien lo inspeccionó y con mi abuelo de pie haciendo la retrospectiva desde los años 70, en Angola, hasta la venida para Portugal.

El Citröen DS 20 D Super tiene historias que contar. Las que viven en la memoria y las que aún va a escribir. ¡Es un clásico que marca!

IMG-2972
DS1
DS5
DS2
DS3
IMG-5175

previous arrow
next arrow
IMG-2972
DS1
DS5
DS2
DS3
IMG-5175
previous arrow
next arrow

Classificados

Siga-nos nas Redes Sociais

FacebookInstagram