Archivos • 03 Jun 2023
Archivos • 25 Jan 2024
ARVW, la investigación aerodinámica en forma de automóvil
El ARVW fue construido en 1980, después de que la industria automotriz estuviera afectada durante varios años por la crisis del petróleo. La designación ARVW significa Aerodynamic Research Volkswagen y demostró que incluso con un motor de baja potencia se podían alcanzar velocidades bastante altas, con un bajo peso y una aerodinámica muy avanzada, siendo aún hoy considerado el automóvil más aerodinámico jamás construido por la marca alemana.
El mayor desafío de Volkswagen fue lograr montar el motor, las ruedas y el conductor en un automóvil lo más pequeño posible. Las ruedas fueron cubiertas por la carrocería para mejorar la aerodinámica y evitar perturbaciones, al igual que el fondo plano. Las dimensiones hablan por sí mismas: el ARVW tiene 838 mm de altura, 1099 mm de ancho, con una longitud de 5000 mm. El peso también es extremadamente bajo, alrededor de 800 kg, debido a su estructura tubular de aluminio y la carrocería de fibra de vidrio y carbono. Todo el proyecto del ARVW fue supervisado por Ernst Fiala, en ese momento Jefe de Desarrollo de Volkswagen, con un equipo compuesto por el diseñador Emil Pommer, el director de operaciones Jürgen Nitz, el especialista en aerodinámica Klaus-Rainer Deutenbach, el técnico de motores Rolf Poltrock y el jefe de equipo Rudolf-Helmut Strozyk. Al final lograron un fantástico coeficiente aerodinámico de 0,15.
El motor que equipa al ARVW fue extraído de un camión, un motor diésel de seis cilindros en línea con 2,4 litros de cilindrada, montado detrás del conductor. El motor no estaba totalmente original, ya que Volkswagen instaló un turbo e intercooler más grandes para alcanzar los 179 CV. El intercooler tenía la particularidad de tener rociadores de agua para reducir la temperatura del aire. El motor estaba acoplado a una caja de cambios tradicional de Volkswagen.
En octubre de 1980, el ARVW fue llevado a la pista de pruebas de Nardò y, en la primera hora de pruebas, logró alcanzar los 355 km/h, posteriormente llegando a los 362 km/h con el piloto Keke Rosberg. Pero además de las velocidades alcanzadas por el automóvil, lo más impresionante eran sus consumos. En una prueba realizada por Popular Science, a una velocidad de 145 km/h, el ARVW tuvo un consumo de solo 3,3 litros por cada 100 km; a una velocidad de 258 km/h, el consumo fue de 6,1 litros por cada 100 km; y a una velocidad de 346 km/h, el consumo fue de 13,6 litros por cada 100 km. No debemos olvidar que estábamos en 1980 y que los motores diésel aún eran bastante rudimentarios y no podían alcanzar grandes velocidades, especialmente cuando se montaban en automóviles tradicionales.
Además, a pesar de que fueron intencionales, ya que el objetivo era la investigación del consumo y la aerodinámica, el ARVW logró batir seis récords mundiales de velocidad, incluyendo el récord de velocidad media en 500 km con arranque desde cero, que fue de 345 km/h, y el récord de velocidad media en una hora, que fue de 353 km/h.