Bugatti Type 68 “Mini-Atlantique”, uno de los mini coches más bellos

En 1942, durante la ocupación alemana, Ettore Bugatti, que entonces vivía en París, diseñó un pequeño Bugatti con un extraordinario motor de 318cc con 4 válvulas por cilindro y compresor. Este mini motor, una verdadera obra maestra de la relojería, debería girar a 12.000 revoluciones por minuto y equipar un pequeño y único modelo. Así nació el Type 68, construido en un solo ejemplar “roadster”, que todavía existe en la colección Schlumpf, en Mulhouse.

Su hijo Roland luego realizaría bocetos para lo que podría haber sido un Type 68 coupé, con puertas tipo “ala de gaviota” e inspirado en las formas del Type 57 “Atlantique”. Pero nunca se llegó a construir en el tiempo de Ettore o Roland Bugatti.

Sin embargo, la historia del Type 68 “Mini-Atlantique” no terminaría con los papeles amarilleando en un cajón. Avanzando rápidamente hasta la década de 1970, encontramos a un alemán apasionado por Bugatti, llamado Uwe Hucke, que comenzó a recuperar y coleccionar todo sobre la gran marca francesa. Incluida la recreación de modelos que solo habían existido en proyecto.

Guiado por Hugh Conway Snr, un experto en Bugatti que era amigo cercano del alemán, Hucke comenzó a rescatar dibujos de fábrica, que incluían los fascinantes bocetos de Roland Bugatti para carrozar el poco conocido proyecto T68. Además de los planos, Conway proporcionó a Hucke un gran lote de piezas del T68, incluido un chasis, un eje trasero y un motor incompleto.

A partir de aquí, Hucke comenzó a reconstruir el motor y decidió recrear el coupé de Roland inspirado en el “Atlantique” diseñado por el fallecido hermano Jean Bugatti. Para ello, contrató a Steeve Bernaud-Heyd, un joven diseñador francés que trabajaba para Romano Artioli en Bugatti Automobili SpA y que adoró la idea de reinterpretar las líneas a partir de los incipientes bocetos de Roland Bugatti para crear una forma elegante donde cupiera un adulto sin descuidar el espíritu Bugatti.

Durante la construcción, Michel Bugatti, hijo de un segundo matrimonio de Ettore, visitó a Hucke y amó el “Mini Atlantique”. Sin embargo, el proyecto se interrumpió con la muerte de Hucke en abril de 2002. El inacabado T68 fue heredado por su hija Angela, quien compartía la pasión por la marca y continuó el trabajo con el apoyo de “The Bugatti Trust”.

El resultado final de esta recreación probablemente habría complacido a Ettore, Jean y Roland Bugatti. Incluso diría que quizás sea el mini coche más hermoso del planeta.