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Volkswagen Golf A59, el especial de homologación que nunca llegó a ser
Por Tiago Nova
La tercera generación del Volkswagen Golf comenzó su producción en agosto de 1991 y estuvo en el mercado hasta octubre de 1997, momento en que fue reemplazado por la cuarta generación del Golf. Entre las versiones más atractivas del Golf, podemos encontrar el GTI y el VR6, sin embargo, existe una versión aún mejor que estas dos, pero que nunca fue comercializada, denominada A59.
El Volkswagen Golf A59 sería la versión de homologación para el WRC, según los reglamentos del Grupo A, para competir con modelos como el Ford Escort RS Cosworth o el Lancia Delta HF Integrale, y se esperaba que compitiera en 1994.
La versión de competición nunca llegó a ser producida, sin embargo, se produjeron dos prototipos de carretera equipados con un motor de 2.0 litros de cilindrada, 16 válvulas, un turbo Garrett T3 o KKK (las fuentes difieren) y un intercooler que era enfriado con chorro de agua, para desarrollar 275 CV a 6000 rpm y 370 Nm de par a 3500 rpm. La potencia se enviaba a las cuatro ruedas a través de una caja de cambios manual de seis velocidades de FF Developments y un sistema viscoso Haldex, similar al utilizado en el posterior Golf R32. Podía alcanzar los 100 km/h en cinco segundos y tenía una velocidad máxima de 270 km/h. El peso total del modelo de carretera era de 1373 kilogramos.
Estos prototipos fueron producidos con la ayuda de Schmidt Motorsport por encargo de Volkswagen Motorsport en 1992. Schmidt no utilizó el motor de 2.0 litros del GTI, sino que desarrolló un motor nuevo desde cero, con una cilindrada de 1998 cc.
Además de la mecánica única, la carrocería recibía ensanchamientos más pronunciados, salidas de aire en el capó, donde se podía ver el motor, parachoques delantero diferente, con más entradas de aire para la refrigeración de los diversos componentes, alerón trasero y parachoques trasero diferentes, todo producido en fibra de carbono y Kevlar. El exterior se completaba con llantas de cinco brazos de 16″. En el interior tenía una jaula antivuelco, así como asientos Recaro A8. Además, el volante Momo era también distintivo y el panel de instrumentos digital de Bosch solo tenía lo esencial.
La producción estimada sería de 2500 unidades para proceder a la homologación, pero Volkswagen decidió cancelar el proyecto. De los dos prototipos construidos, ambos sobreviven; uno suele estar en exhibición en el museo de la marca y el otro está en SMS, la antigua Schmidt Motorsport, además de un modelo de exhibición con una carrocería igual. Se cree que aún existen dos carrocerías completas sin mecánicas, el prototipo utilizado para pruebas en túnel de viento y los varios kits estéticos que se produjeron para aplicar en los modelos de producción.